martes, 31 de outubro de 2017

ARREDOR DE VINIERON COMO GOLONDRINAS


Que propensión a ler historias tristes!
É certo.
Este é o quinto curso do Club de Lectura Biblos Aguiar. Poucas veces conseguimos ler novelas que non foran tristes, porque, o non somos quen de escoller algo que mova a risa (Foi excepción El abuelo que saltó por la ventana...?) o, como algún lector mantivo onte na charla, o arte reflicte a vida, e, moitas das vivencias resultan tristes.

Vinieron como golondrinas é unha novela aparentemente sinxela que oculta un traballo de depuración artística. O narrador elixe contar desde a sutileza as vivencias duns nenos dunha familia relativamente acomodada durante o ano 1918, o ano da gripe española. 

Unha historia sobre as perdas: o medo a perda das atencións da Nai ante o nacemento dunha irmán, a perda dunha extremidade (que non implica a inutilidade física) e a máis terrible perda: a da Nai, unha Nai que deixa un oco maiúsculo, que mesmo provoca o desmantelamento da casa que foi fogar e ameaza á pervivencia da familia.

Falamos tamén dos modos posibles de ser pais, da tébeda reivindicación a importancia da muller (aínda como eixe pragmático da familia), da perfecta configuración das persoaxes...

Soubemos, pois, que viñamos de ler unha novela que parecía menor e non o é.
Un exercicio de estilo no que o narrador procura desenfocar a fotografía da historia: o verdadeiramente importante ocorre nun plano desenfocado, porque na Historia das nosas vidas adoita ter máis importancia a nosa Intrahistoria.

luns, 30 de outubro de 2017

HORA DE LER

HORA DE LER

5ª SEMANA [5ª SESIÓN]

Achegámonos da man de Rafael Dieste e de Ana Cristina Herreros a ese tempo no que o pracer de ler se confunde co medo de que alguén esté a vixiarnos mentras lemos.

Ilustración: Kat Menschik

venres, 27 de outubro de 2017

VINIERON COMO GOLONDRINAS...

Luns 30 de outubro
19 horas
Libraría Biblos

Reunión do Club de Lectura Biblos / Aguiar

WILLIAM MAXWELL, Vinieron como golondrinas, 1937.



COOLE PARK, 1929

Medito sobre el vuelo de una golondrina,
sobre una anciana y su vieja mansión,
un plátano y un tilo perdidos en la noche
aunque brillante sea esa nube al oeste,
grandes obras alzadas allí, contra natura,
para sabios y bardos que vendrán tras nosotros,
pensamientos tejidos en un pensar ya único,
un esplendor cual danza que engendró aquellos muros.

Allí fue Douglas Hyde, antes de forjar en prosa
aquella noble espada que le dieron las Musas,
allí uno que ostentaba una pose viril
a pesar de ser tímido, allí un hombre pausado
y pensativo, John Synge, pero también aquellos
hombres apasionados, Shawe-Taylor y Hugh Lane,
hallaron el orgullo basado en la humildad,
un escenario idóneo y mejor compañía.

Igual que golondrinas, vinieron y se fueron;
y aun así el poderoso genio de una mujer
podía retener a una golondrina;
y allí media docena habla en formación,
en órbita se diría de un punto cardinal,
que hallaron certidumbre en el aire de ensueño,
la intelectual dulzura de los versos aquellos
que cruzaban el tiempo o bien lo remontaban.

Erudito, poeta, ocupad vuestro puesto
aquí cuando no queden corredores ni estancias,
y ondeen las ortigas sobre una masa informe
y arraiguen arbolillos entre la piedra rota;
dedicad —con los ojos humillados a tierra,
de espaldas al destello del sol en las alturas
y a todo el atractivo sensual de la sombra—
un instante en recuerdo al laurel de sus sienes.

William Buttler Yeats
&
Giacomo Balla
 Traducción: Antonio Rivero Taravillo

COOLE PARK, 1929

I meditate upon a swallow's flight,
Upon a aged woman and her house,
A sycamore and lime-tree lost in night
Although that western cloud is luminous,
Great works constructed there in nature's spite
For scholars and for poets after us,
Thoughts long knitted into a single thought,
A dance-like glory that those walls begot.

There Hyde before he had beaten into prose
That noble blade the Muses buckled on,
There one that ruffled in a manly pose
For all his timid heart, there that slow man,
That meditative man, John Synge, and those
Impetuous men, Shawe-Taylor and Hugh Lane,
Found pride established in humility,
A scene well Set and excellent company.

They came like swallows and like swallows went,
And yet a woman's powerful character
Could keep a Swallow to its first intent;
And half a dozen in formation there,
That seemed to whirl upon a compass-point,
Found certainty upon the dreaming air,
The intellectual sweetness of those lines
That cut through time or cross it withershins.

Here, traveller, scholar, poet, take your stand
When all those rooms and passages are gone,
When nettles wave upon a shapeless mound
And saplings root among the broken stone,
And dedicate - eyes bent upon the ground,
Back turned upon the brightness of the sun
And all the sensuality of the shade -
A moment's memory to that laurelled head.

RECUERDA QUE VAS A MORIR. VIVE, Paul Kalanithi

PAUL KALANNITHI, Recuerda que vas a morir. Vive, Seix Barral, Barcelona,

[NUC KAL rec]

   Yo estaba seguro de que no sería médico. Me tumbe al sol en una meseta desértica que quedaba justo por encima de nuestra casa y me relajé. Mi tío, médico como muchos de mis parientes, me había preguntado ese día a qué profesión pensaba dedicarme, ahora que me iba a la universidad, y yo apenas había hecho caso a la pregunta. Si me hubieran obligado a responder, supongo que habría dicho que quería ser escritor, pero, en realidad, pensar en ese momento en una profesión determinada me parecía absurdo. En pocas semanas iba a abandonar este pequeño pueblo de Arizona, y la verdad era que no me sentía como el que se dispone a trepar por los peldaños de una carrera profesional, sino más bien como un electrón frenético a punto de alcanzar la velocidad de escape y de salir disparado hacia un universo extraño y destellante.
   Permanecí tumbado sobre la tierra, inmerso en la luz del sol y en los recuerdos, sintiendo cómo iba encogiendo de tamaño este pueblo de quince mil habitantes, a mil kilómetros de mi nueva residencia en Stanford y de todas sus promesas. 
   Para mí, la medicina no era tanto una presencia como una ausencia; concretamente, la ausencia constante de un padre mientras yo crecía: un padre que salía a trabajar antes del alba y que volvía de noche para cenar un plato de comida recalentada. Cuando yo tenía diez años, mi padre nos había trasladado (éramos tres chicos de catorce, diez y ocho) de Bronxville, Nueva York, un barrio residencial denso y acaudalado al norte de Manhattan, a Kingman, Arizona, que estaba en un valle desértico rodeado por dos cordilleras y que, para el mundo exterior, no pasaba de ser un punto donde detenerse a repostar de camino a otra parte. Él se había sentido atraído por el sol, por el coste de la vida —¿cómo, si no, iba a poder sufragar la educación universitaria que quería para sus hijos?— y por la oportunidad de establecer una consulta de cardiología propia que abarcara toda la región. Su infatigable dedicación a los pacientes lo convirtió enseguida en un miembro respetado de la comunidad. Cuando nosotros lo veíamos a última hora de la noche o los fines de semana, mi padre venía a ser una combinación de dulces muestras de afecto y severas imposiciones, de abrazos y besos y rígidas advertencias.

xoves, 26 de outubro de 2017

EL DISCO DIABÓLICO, Jordi Sierra I Fabra

JORDI SIERRA, El disco diabólico, Algar, Valencia,  2012, 158 páxinas.

[NC SIE dis]

Canción 1

   El logotipo de Karma Discos brillaba en la sala de espera como si fuera un anuncio mágico, un pasaje para el paraíso. «Zas» y «ffsss...», se encendía y se apagaba  esparciendo  estrellitas.  Estaba  hecho  de  neón rojo y azul, y la guitarra animada que bailaba en el medio se hallaba sentada en posición de loto.
   Una guitarra haciendo zen. Pero la combinación resultaba tan sugestiva como cálida. O al menos así se lo parecía a él. Llevaba tantos años, desde que era niño, soñando con estar allí, con grabar y editar para Karma Discos, que ahora, cuando se hallaba a las puertas de la decisión más importante de su vida...
   No se lo podía creer.

mércores, 25 de outubro de 2017

¡PATÉNTALO!, Matgorzata Mycielska


MATGORZATA MYCIELSKA, ¡Paténtalo!, Ekaré, Caracas, 2016, 124 páxinas.

 [AI MYC pat]

**********
El libro de los inventos inútiles y disparatados de la historia. Ese é o subtítulo deste entretenido percorrido polo fecundo inxenio humano que ilustran Aleksandra Mizielinska y Daniel Mizielinski.
**********

DRAGÓN TRIPULADO [1647]

   Hace muchísimo tiempo, en una mañana helada de febrero, sobre el palacio real de Varsovia, apareció un dragón. No, no se trata de un cuento. El dragón era real, solo que... mecánico. Tenía 1,5 metros de largo (quizá poco para un dragón) y una propulsión que se generaba a través de ruedas, palancas y muelles.
  
Fue construido por Titus Livius Boratini, arquitecto italiano e inventor afincado en Polonia. El dragón era un prototipo de una máquina voladora más grande y más compleja, sobre la cual Boratini estaba trabajando. El vuelo de prueba fue organizado para el rey polaco Wladyslawa IV Waza con el fin de entusiasmarlo y conseguir del tesoro real la cantidad (¡nada desdeñable!) de 500 ducados para llevarla a cabo. En la exhibición se usó un mecanismo de propulsión provisional y con un gato como único pasajero, y fue exitosa. Sin embargo, durante el segundo vuelo algo salió mal y el dragón cayó desde gran altura. Pero el constructor no se desanimó y siguió trabajando en su invento. La versión final nunca pudo materializarse. De todas maneras, de haberse construido, no hubiera podido despegar con el peso de tres personas, como planificó Boratini. 


martes, 24 de outubro de 2017

DÍA DA BIBLIOTECA

COMO MARY POPPINS, PERO SIN VOLAR

   Soy sobrino de bibliotecaria. Desde que tengo memoria, mi tía, que acaba de cumplir ochenta años, me ha regalado un libro el día de mi cumpleaños. Primero fue la serie de Osear, con su Kina y su láser, de la gran Carmen Kurtz; llegaron después las aventuras de Los Cinco, algunos clásicos ilustrados, la gran Nada de Carmen Laforet… La lista es larga y el disfrute ha sido mágico, porque mi tía entiende la lectura como algo que cura, que aleja al inocente de lo que agrede, y yo -y ella lo sabe- siempre he sido demasiado vulnerable a lo que daña, sea o no imaginado, sea o no real.
   Mi tía se llama Nuria y desde niña sufre mucho de la vista. Aun así, trabajó durante décadas fomentando el amor por la lectura en hombres y mujeres, chicos y chicas a los que no conocía, pero cuya mirada no tardó en aprender a leer, a identificar y a descifrar. Ella decía -y a veces dice todavía- que “repartía refugio”, y se emociona al recordarlo. La he oído también confesar en algunos momentos de nuestra historia común, que no fueron fáciles y que vivimos juntos: “Decidí ser bibliotecaria porque así me aseguraba de que, por muy mal que nos fueran las cosas, aunque faltara el agua caliente o la calefacción, siempre tendríamos un libro en casa”. Ahora, quince años después de su jubilación, soy yo quien le recomienda lecturas. Leemos un libro a la vez y nos juntamos cada quince días a coomer y a comentar lo leído, en lo que hemos bautizado como “El club de las 2”, porque intentamos en lo posible que coincida con el día 2 de cada mes, a las 2, y porque somos dos almas lectoras que no tienen freno. Durante estos años de club, ella me ha contado cosas, muchas cosas de su vida en la biblioteca, y desde que la oigo hablar como lo hace sobre su amor por esa vocación, que no decrece a pesar del tiempo, no puedo dejar de maravillarme y de preguntarme cómo definiría yo a una bibliotecaria -o a un bibliotecario- llegado el caso.
   Hasta hace unos meses no di con la respuesta.
   Fue a raíz de la publicación de Un hijo, durante una charla en un centro de enseñanza de una capital andaluza. Y fue precisamente gracias a un niño de diez años que, junto con otros 100, había leído la novela y quería conocer a su autor. Por motivos de espacio, el acto tuvo lugar en la biblioteca del centro, con un par de profesoras y la encargada de la biblioteca. La charla fue muy intensa, mucho más de lo que yo esperaba, y se alargó. Cuando por fin llegamos al final del turno de preguntas, un niño que estaba sentado en la primera fila levantó la mano.
   —A mí lo que más me ha gustado del libro es María -dijo refiriéndose a la orientadora del centro, que es, junto con el pequeño Guille, la protagonista del libro.
   Quise saber por qué. El niño, llamado Ismael, se rio un poco y luego, mirando a una de las tres mujeres que estaban junto a la puerta. dijo:
   —Porque es igual que la seño Lourdes. -Una de las tres mujeres que estaban junto a la puerta se encogió un poco y negó con la cabeza, incapaz de reprimir una sonrisa. Ismael no había terminado-. Vive en la biblioteca porque si no los libros a lo mejor se van. O se mueren.
   Se hizo el silencio en la biblioteca. Nadie se rio. Nadie dijo nada. Fueron segundos llenos de respiraciones contenidas, de tensión y de infancia.
   —Es que es bibliotecaria -volvió a hablar Ismael. Y al ver que yo lo miraba sin saber qué decir, debió de entender que necesitaba explicarse mejor, y añadió-: O sea, como Mary Poppins, pero sin alas.
   —Hoy es un día especial. Celebramos el Día de las Bibliotecas y celebramos también que cientos, miles de Mary Poppins sin alas velan por los libros que las habitan para que no se mueran ni se vayan, e Ismael siga creyendo que la vida está en los libros y su reflejo fuera. Hoy es el día en que, un año más, la magia se renueva y todas las bibliotecarias y bibliotecarios del mundo se saludan con una mirada cómplice y un largo. hermoso y tierno: 
   “Supercalifragilísticoespialidoso”. 
Alejandro Palomas
&
lustración: Manuel Marsol

luns, 23 de outubro de 2017

HORA DE LER

HORA DE LER

4ª SEMANA [4ª SESIÓN]

Non hai litixio. Os homes da ilustración de Manuel Marsol non desenfundan as súas pistolas. Nunca haberá salvaxe oeste nun pobo no que a biblioteca triplica o espacio do saloon

O home do libro azul le, sen dúbida, un texto de Alejandro Palomas; o barbudo do libro vermello, le a Ledicia Costas.

venres, 20 de outubro de 2017

A ELEGANCIA DO SÉCULO, Pura Tejuelo

PURA TEJUELO, A elegancia do século, Xerais, Vigo, 2017, 66 páxinas.

[NG TEJ ele]


A RECEITA DUNHA TORTA

Fun rememorando a receita daquela torta
que nunca farei
mitigando o desánimo que traen os récordos.
Dous meses collendo a mesma ruta de ida por volta
ao hospital.
Ela non me recoñece
pero alédase cando comentamos os ingredientes da sobremesa.

De volta
adorméntanse os bancos do autocar
envoltos nun lenzo de reberetes amarelentos que trae
a tarde,
resplandores intermitentes
que caen inclinados sobre a caluga e entretéñense nas mans.
Os viaxeiros incorpóranse á durmideira dos que van ao seu destino.

Algúns asentos viaxan de costas,
preguntóme se non perderían o norte,
se estarían afeitos ao mareo,
despedíndose das cousas
que outros comenzarían a ver.
É como perderse.

Talvez acordasen
co engado da receita dese doce
que nunca farei.

xoves, 19 de outubro de 2017

ECONOMÍA CANALLA, Loretta Napoleoni

LORETTA NAPOLEONI, Economía canalla, Paidós, Barcelona, 2009, 288 páxinas.

[34 NAP eco]

Un libro para dotar a los consumidores de información sobre el mundo en el que vivimos. ¿Qué tienen en común el auge del comercio sexual en Europa, el escándalo de las hipotecas basura en Estados Unidos, los productos falsificados de la industria china y la filantropía de los personajes célebres en África? Con los biopiratas que se introducen en la industria de la sangre, bandidos que expolian los mares profundos para alimentar sus viveros de pescado, la pornografía que se desarrolla vitualmente en Second Life y los juegos como World of Warcraft que salen de talleres donde se explota a los trabajadores, ¿cómo consiguen las economías canalla convertirse en imperios globales? Con la precisión de una economista y la fluidez narrativa de una novelista, la periodista Loretta Napoleoni examina cómo las fuerzas económicas oscuras están dando una nueva forma al mundo, convirtiendo en víctimas a millones de personas normales cuyas vidas están atrapadas en el mundo de fantasía del consumismo. Napoleoni saca a la luz la arquitectura de nuestro mundo y, al hacerlo, ofrece una visión nueva sobre los muchos e irresolubles problemas de nuestra época.

mércores, 18 de outubro de 2017

CHARAMUSCAS, Suso Lista

SUSO LISTA, Charamuscas, Embora, 2017, 15o páxinas.

[NG LIS cha]

Vivo no último piso dun dos edi cios máis altos dunha vila mariñeira. A situación converte a miña casa nunha atalaia privilexiada. Desde a miña habitación, orientada ao Sur, vexo as praias, o porto e a ría. O sol e a lúa. Ao carón da ventá, unha mesa na que escribo. Nela teño pousados uns prismáticos para ver os barcos e comprobar de que país proceden os centos de iates que fondean nesta rada protexida de todos os ventos. Con eles gústame xogar ás adiviñas. Antes de ver a bandeira, imaxino de onde son polas maneiras de manobrar, pola feitura do casco ou pola orde coa que estiban os aparellos na cuberta. Sempre adiviño a procedencia da maioría deles. Onte aconteceu algo que nunca tiña visto.

martes, 17 de outubro de 2017

17 DE OUTUBRO: DÍA DAS ESCRITORAS



Nesta conmemoración do Día das escritoras, reproducimos este cartel publicitario de Anagrama porque podemos presumir de que dúas das 13 autoras visitaron o noso IES: Marta Sanz e Cristina Sánchez-Andrade.
En fin: pura anécdota (a nosa anécdota).

luns, 16 de outubro de 2017

HORA DE LER

HORA DE LER

3ª SEMANA [3ª SESIÓN]


Veroutono!!!

Este neoloxismo salta de xornal en xornal; escoitámolo no televisor e vémolo en todas as redes sociais.

O certo é que haberá que facer como a rapaza da ilustración de Oliver Jeffers: refrescar os pes mentras temos nas mans os relatos de Berta Dávila ou Marie Luise Kaschnitz.

mércores, 11 de outubro de 2017

LA TIERRA DE ANA, Jostein Gaarder

JOSTEIN GAARDER, La tierra de Ana, Siruela, Madrid, 2013, 120 páxinas.

[NUC GGA tie]


   Desde que era capaz de recordar, en Nochevieja las familias del pueblo subían en trineo hasta las granjas de verano. Los caballos se almohazaban y se adornaban para recibir el nuevo año, y en los trineos se colgaban cascabeles y se ponían antorchas encendidas para iluminar la oscuridad de la noche. Algunos años, una máquina de abrir pistas de esquí subía antes para que los caballos no patinaran en la nieve suelta. Lo importante era llegar a la montaña cada Nochevieja no en esquís o en moto de nieve, sino en caballo y trineo. La Navidad era mágica en sí, pero el viaje en trineo hasta las granjas de verano arriba en la montaña era la verdadera aventura del invierno.
   Todo era diferente en Nochevieja. Niños y adultos revueltos. Era el único día del año en el que las familias se mezclaban por completo. En solo el transcurso de una noche se salía de un año y se entraba en otro. Se pisaba una frontera invisible entre lo que había sido y lo que vendría. ¡Feliz Año Nuevo! ¡Gracias por todo, en este año que acaba!
   A Ana le encantaba la Nochevieja, y era incapaz de decidirse por lo que más le gustaba de todo: si subir a la granja de verano para celebrar lo poco que quedaba de año o si el camino de regreso, bajar de nuevo al pueblo bien envuelta en una manta de lana y con el cálido brazo de su madre, de su padre o de algún vecino rodeándole el hombro.
   Pero en la Nochevieja del año en el que Ana cumplió 10 años no había caído nada de nieve, ni arriba en las alturas ni abajo en el pueblo. La helada se había agarrado ya al paisaje, pero salvo alguna pequeña mancha aquí y allá, la montaña estaba desnuda, sin nada de nieve. Incluso el imponente pico estaba vergonzosamente desnudo bajo el cielo abierto, despojado de su blanco abrigo de invierno.
   Entre los adultos se murmuraba algo sobre «calentamiento global» y «cambio climático», y Ana se fijó en estas nuevas palabras. Por primera vez en su vida tuvo una ligera noción de que el mundo se estaba deteriorando.
   Pero nada ni nadie les impediría subir a la montaña en Nochevieja, y el único medio de transporte posible era el tractor. Además, este año la visita tradicional a las granjas de verano tendría que hacerse durante el día porque, sin nieve en la montaña, la Nochevieja sería tan oscura que no se vería absolutamente nada. Ni siquiera las antorchas serían de mucha ayuda, y además estas tendrían un aspecto ridículo en los tractores o remolques.
   En consecuencia, temprano el día de Nochevieja, cinco tractores subían a paso de tortuga por el bosque de abedules camino de la montaña, cargados de buena comida y bebida. Con nieve o sin ella, había que conseguir a toda costa un brindis por el año nuevo y algunos juegos en el suelo helado.
   En estas Navidades no solo se hablaba de la ausencia de nieve. Después de Nochebuena, se había visto en un par de ocasiones renos salvajes abajo en el pueblo junto a las granjas, y se bromeaba con que Papá Noel se habría olvidado de algunos de sus renos tras repartir los regalos en Nochebuena.
   Ana comprendió que esto de los renos era algo aterrador e inquietante. Nunca hasta entonces había ocurrido que renos salvajes bajaran hasta las poblaciones. En una granja intentaron alimentar a uno de ellos muerto de miedo, y en los periódicos salieron fotos: «Renos salvajes ocupan los pueblos de la montaña.

martes, 10 de outubro de 2017

EL TERCER LOBO, Francisco Javier Olivas

FRANCISCO JAVIER OLIVAS, El tercer lobo, Ediciones Cívicas, 2017, 474 páxinas.

[NC OLV ter]


Xa temos a disposición dos lectores este relato sobre a difícil construcción da identidade sexual nunha sociedade homofóbica.

luns, 9 de outubro de 2017

HORA DE LER

HORA DE LER

2ª SEMANA [2ª SESIÓN]
Así de disciplinados, con toda a concentración do mundo, pero sen deixar de mirar ao obxectivo (como fan os lectores da ilustración de Jimmy Liao), andaremos a ler A volta de Rafael Dieste ou El origen de las especies de Viktor Pelevin.

venres, 6 de outubro de 2017

xoves, 5 de outubro de 2017

mércores, 4 de outubro de 2017

martes, 3 de outubro de 2017

PRIMEIRA REUNIÓN DO CLUB DE LECTURA BIBLOS AGUIAR

WILLIAM MAXWELL, Vinieron como golondrinas, Libros del Asteroide, Barcelona, 2006, 203 páxinas.
**********
Xa temos data para o primeiro encontro do Club de Lectura Biblos Aguiar na súa quinta edición.
O  luns 30 de outubro ás sete da tarde na Libraría Biblos alomenos arredor de 25 persoas sentaranse a falar coa escusa de ter lida a novela de William Maxwell. 

Como sempre acostumamos,  convén recordar que este Club de Lectura estará sempre aberto a novas incorporacións, ben para esta primeira reunión ou as próximas. 

Podemos xa adiantar que a seguinte sesión será o día 27 de novembro. Tras a lectura de Luns teremos a sorte de falar coa súa autora, Eli Ríos., que ven de gañar con esta novela o Primeiro Premio Torrente Ballester en lingua galega.


luns, 2 de outubro de 2017

HORA DE LER

HORA DE LER

1ª SEMANA [1ª SESIÓN] 

Voltamos ás boas prácticas! 
Nesta primeira semana de Hora de ler o Equipo da Biblioteca deixa enriba das mesas dúas suxestións de lectura: un relato de Suso Lista e un conto de Vicente Gallego.


Ilustración: Elle Frances Sanders